Último jueves

22 de junio de 2007

Se negaba a entrar a clases, pensaba que tal vez si no asistía al día siguienta ella estaría ahí, como todos los días de la semana laboral, esceptuando el viernes, que no por ser social faltaba sino que solo eran cuatro horas las correspondientes a la materia.

Ese día en la cama empezo a visualizar, recordaba como exactamente dos semestres anteriores la había conocido, no podía ya imaginar algun semestre sin ella, siempre desde su primer encuentro habían estado juntas, 3, 4, 5 de la mañana, y veía las clases, las escuchaba, las sentía ya las anhelaba, empezo a recordar desde la primer mirada, el único abrazo, los reclamos, los sueños, confesiones, secretos, sentimientos, vio de nuevo el llanto compartido, los libros leídos, las desiluciones, los miedos, la vio de nuevo y de súbito un suspiro inedito de llanto la volvio en si, se levanto de golpe, con la imagen del abrazo anhelado, sentada en la cama se dio cuenta de la hora, era tarde, se había quedado soñando sin darse cuenta en sus recuerdos.

Tomo la lap top, trato de terminar lo que no pudo concluir al sumergirse entre recuerdos, pero fué en vano, cerro los programas y corrio, rápido, corrio, miedo, corrio, con llanto por dentro, ya en la escuela decidio no entrar no sin ese último trabajo que necesitaba entregarle, se adentro a un café internet y con miedo y desilucion justo a las 6:50 am empezo a escribir, sin pensar, sin sentir, con enojo por dentro con llanto clavado en el corazón, en la ilusión, y de pronto termino pero no podía engañarse, no quería entrar a clases, no, no este día, tal vez si no entraba el día de mañana la encontraría, tomo las hojas entre sus manos, las vio, las leyo, las sintio y lloro.

Camino hasta la entrada hoy tan maldita (penso), subio el primer piso, conto por primera vez los pasos de las escaleras al salón, ligeramente abrío la puerta dio un paso al frente y ya no desperto